domingo, 27 de abril de 2008

onenzaro

Recuerdas a Misi?Cuando nos conoció no se separaba de nosotros y cuando lo perdimos le escribimos un millón de carteles pidiéndole que volviera, incluso creíamos que los había leido porque había huellas de gatito en ellos.También recuerdo que arrancábamos las piedras de pizarra por capas y buscábamos mapas del tesoro en las marcas que dejaba la tierra en la piedra. Luego íbamos a la ikastola haciendo malabares por el muro y colándonos por un agujero de la vaya, jugábamos a conquistar las piedras del campo de futbol y yo siempre me quedaba con la dorada, porque para mí era de oro y brillaba al sol.También bajábamos por la tubería aquella de cemento como si fuera un tobogán para ver si encontrábamos los juguetes que los niños tiraban por las ventanas.¿y cuando la abuela nos llevaba a la playa? En septiembre siempre había mareas bravas y nos metíamos como locos en el agua con unas olas de cuatro metros, las de la familia jordan las llamábamos.La abuela siempre hacía tortilla de patata y filetes empanados y despúes de comer nos tirábamos horas haciendo un gran hoyo para meternos cuando subía la marea.En navidad esperábamos impacientes al olentzero y en noche vieja comíamos lacasitos en vez de uvas, y por supuesto nunca faltaron huevos kinder.También me acuerdo de las cien perdices que cazó el tio y que nosotros nos colamos en la huerta y las soltamos todas, algunas, las cogíamos y las soltábamos al aire gritando: ``La paloma de la paz!´´. O el día que le desmantelamos al vecino la parte donde tenia a los conejos.Cuando llovía esperábamos a que escampase y salíamos a por caracoles para luego hacer carreras, un día de esos me acuerdo que nos tiramos mutuamente a las ortigas y llegamos a casa con el cuerpo rojo entero.No puedo parar de sonrreirme recordando tantas cosas, nuestro cerdo porky, al que inch´bamos de pan o el pato lucas. Íbamos a ser los mejores veterinarios del mundo eh?Una tarde hasta nos comimos cien chicles cada uno para ver si nos tocaba un tamagochi gratis. La plaza, las máuinas, lo que hacíamos de rabiar a Aitor...que lejos queda y que buen sabor de boca deja

martes, 22 de abril de 2008

Ed Wood


``Ya verás como escampa a la vuelta de la esquina´´
1994. Ed Wood de Tim Burton

sábado, 19 de abril de 2008

Libertarias

-Las mujeres tienen que venir con migo ¿Donde estan sus mujeres?
- Aqui no hay mujeres
- ¿Y esas?
- Esas tienen bastantes mas huevos que tu


1996.Libertarias de Vicente Aranda

lunes, 7 de abril de 2008

Yo no hice el viaje, el viaje me hizo a mi (V)


21 de marzo


Hoy ha sido el primer día malo que he tenido en todo el viaje. Ayer finalmente jugamos al poker y nos acostamos tan tarde que no hemos podido seguir el itinerario de hoy. Queríamos ir a ver Siena y otro pueblecito medieval que está muy cerca, pero lo hemos cambiado por unas horas mas de sueño :(El tiempo era horrible y no ha parado de llover, cosa que mis pobres zapatillas no han podido resistir, y he caminado cuatro horas seguidas empapada por Florencia.Además me ha desaparecido el ipod, cosa que mi melomanía tampoco ha podido resistir y me ha hecho estar cabreada toda la tarde, finalmente el mp3 ha aparecido misteriosamente (en fin)La casa en la que estamos más parece un campo de refugiados, aquí viven cuatro chicos brasileños y todas las tardes y noches hay a parte 4 o 5 kolegas suyos, asique nos juntamos un montón de gente. A parte hay dos americanas que viven en Barcelona, más nosotras dos. Las conversaciones son de lo más variopintas, italiano, español, inglés, brasileño...Con este día de mierda me despido por hoy sin ver Siena.Mañana pronto rumbo a Roma pasando antes por Pisa.El viaje va tocando su fin y mañana tengo que acordarme de felicitar a alguien.

sábado, 5 de abril de 2008

Tierra y libertad


``Hoy quiero olvidarlo todo; balas, trincheras, política, muerte, traiciones... quiero sentirme humana ante todo´´
``El mañana es nuestro compañeros´´
1994. Tierra y libertad de Ken Loach

miércoles, 2 de abril de 2008

Yo no hice el viaje, el viaje me hizo a mi (IV)




20 de marzo




y al final nos fuimos a comer al restaurante más barato que nos hemos encontrado en todo el ciaje, 4.50 la pizza margarita y de postre un helado de esos tan ricos que tienen aquí ( pero no hay dulce de leche...)Después llegó el paseo de rigor para ver el Duomo y la plaza Mayor(yo la he llamado así) que albergaba una gran cantidad de esculturas, entre ellas, la copia del David. Florencia no es precisamente barata y con la copia de la escultura nos basta para hacernos una idea del original, por el que cobran 10 euros por ver.Volvimos al hotel, no sin antes pasar por nuestro restaurante económico, donde pedimos unos rabiolis y una lasaña (Platos que me comí como prometí a la salud de Flamígero :))Comimos en la inmensa cama de nuestra habitación con cerveza y vino, disfrutandolo al máximo y estirando el precio de la habitación. A ls 8 de la mañana en pie de nuevo para hacer las maletas y partir.Tras un capuccino que nos absorviera el sueño visitamos el famoso mercadillo de San Marco y encontré lo que tanto tiempo he estado esperando, UN BOMBÍN!!! Con la compra del sombrero se me borraron todas las penas, el hambre, el cansancio, incluso olvidé que no teníamos donde dormir.Tras unas cuantas llamadas conseguimos que un grupo de chicos nos acogiera, y tras perdernos durante un buen rato por las calles florentinas, por fín, llegamos a la ansiada casa, habiéndonos recorrido la mitad de la ciudad con 20 kilos a la espalda.... y mi bombín!!Tras comer algo nos han llevado a un mirador, desde allí se ve toda Florencia, preciosa, como es. El sol ha ido descendiendo mientras el sonido de una guitarra susurraba de fondo.hoy necesito algo de soledad y no la encuentro, pero disfruto de este tiempito que he sacado para escribir estas líenas en el salón de una casa desconocida, mientras Ana baja a por cervezas.Mi mp3 se queda sin batería mientras suena Perfect Day de Trainspotting, y esta noche toca partida de poker.

domingo, 30 de marzo de 2008

Yo no hice el viaje, el viaje me hizo a mi (III)


19 de marzo


En estos momentos casi no se en el día en el que vivo, la desorientación quedará clara con los últimos acontecimientos.Llegamos a Bolonia con la fe de que nos acogerían unos amigos Ana a los que nunca encontramos. Era bastante tarde para el horario que lleban los italianos por lo que decidimos meternos en el único bar que estaba abierto, y que abria hasta las 3 de la mañana. Tras un par de rondas de cerveza comenzamos a entrar en calor y a olvidarnos de que no teníamos donde dormir. La estampa del bar era de lo más pintoresca. Un grupo de hombres de lo más diverso nos miraba desde una esquina, y en la otra tres ancianillos, quietos, sin hablar, solo había uno que se movía para salir a fumar, eran casi fantasmales. Todo esto ambuelto por un ambiente de jazz que te hacia quedarte en una burbuja. Decidimos seguir allí tras comprar una botella de vino tinto siciliano. La camarera que nos vio llegar desde el principio casi agarrotadas y con las enormes mochilas, adoptó el rol de madre y se propuso que saliésemos contentas de allí. Nos regaló pizza, croissants rellenos de queso, de jamón, panchitos, creps...Salimos de allí sin rumbo alguno, pero con la tripa llena y el sabor del vino reciente en los labios.Acabamos en la estación, extendiendo los sacos en el suelo, haciéndonos una mini acampada. Allí conocimos a un artista milanés que iba rumbo a Roma, y tras el debido apretón de manos italiano, caimos en un sueño más seguro de lo que habría cabido imaginar. A las dos de la mañana nos despertó el artista diciendo que salía nuestro tren, que finalmente no era el nuestro, sino el suyo(vamos que se aburría y nos despertó)Por fin llegó nuestro maldito tresn, a las 5 y pico de la mañana y tras recorrerlo entero buscando sitios libres encontramos una salita donde poder dormir. No se si alguno se durmió, pero a mi se me hizo imposible. A mi lado viajaba un viejuno borracho y superborde, y por la ventana comenzaba a amanecer entre bosques y pequeños pueblecillos que íbamos dejando atras.LLegamos a Florencia, con el artista que decidió acompañarnos, a las siete de la mañana y nos tomamos un último café con nuestro amigo nómada.Tras una pequeñísima vuelta, decidimos quedarnos una noche en un hostal donde nos cobraron 3o eurazos, pero desde sus grandes ventanales veíamos toda la ciudad.Eran las nueve y algo cuando nos dormimos y son las cuatro de la tarde ahora. Los acontecimientos de Bolonia quedan lejanos, ahora Florencia queda a nuestros pies, el dinero escasea, el hambre aprieta... nos vamos a comer.

jueves, 27 de marzo de 2008

Yo no hice el viaje, el viaje me hizo a mi (II)


18 de marzo


Estos dos últimos días de viaje han sido los más cansados de todo lo que llevamos. Despedirse de Venecia ha sido más que triste, dejar su belleza, sus canales... su olor salado.En Verona tubimos que buscarnos la vida y dormir en un albergue desde donde se veia una gran colina con un gran palacio en lo alto. En el albergue había un jardincillo frondoso y lleno de fuentes desde donde se veía la ciudad, no me habría extrañado que en cualquier momento hubieran salido un par de duendecillos correteando de entre los árboles.Por la noche, tras dejar los pesados macutos, nos hicimos una cenita a orillas del rio hasta que se nos puso a llover y tubimos que refugiarnos en el pórtico de una iglesia a beber cerveza, casi sin querer.Pasada la lluvia decidimos darnos un paseo nocturno y ver la ciudad con las luces encendidas. Dante nos vigilaba en la plaza de Erbe con su pose pensativa, velando los sueños de los mucho mendigos que duermen allí a la intemperie.Particularmente esa plaza fue la que más me gustó de verona, puesto que lo demás no hace más que explotar una de las mayores historias de amor y drama.Hoy nos hemos levantado a las 8 y nos hemos hecho el tour de museos como es debido. El duomo principal sin comentarios, eso es rococo y lo demás pura sencillez. La catedral de anastasia, un poco menos recargada, lucía su antiguedad al compás de los gritos de los obreros que la están reformando.El teatro romano me ha encantado, había una gatita que se paseaba por dentro (Fernandita la he bautizado) y que ha acabado en mi regazo buscando los mimos que nunca le dan los visitantes.Visita obligadísima a la casa de Julieta, que ha dejado muuuucho que desar.Primero, por que un millón de personas hacen cola para hacerse una foto agarrandole una teta a la estatua de julieta, que ya está desgastada en esa parte, y luego por que la casa en si no tiene absolutamente nada, escepto una cama muy linda que dio mucho que hablar y que pensar...La tumba de Julieta era algo mucho menos comercial, con unos jardines dignos de parar a sentarse en un banquito y recrearse en su tranquilidad y su silencio. Otra guarrada lo de firmar en las paredes de una tumba, y en la lápida, como si los muertos tubiesen que aguntar nuestras gilipolleces.Con ampollas en los pies, un cansancio de cojones y un rebote más que digno por lo irrespetuosa que es la gente, hemos acabado nuestra estancia en Verona, la ciudad señorial.
Ese día sonó:``Prefiero aquivocarme mil veces a obedecer´´

miércoles, 26 de marzo de 2008

Yo no hice el viaje, el viaje me hizo a mi


17 marzo


``Y fundirme en tus calles para acabar muriendo en el puente de los suspiros, intoxicados de vino rosso. Son pocos, cuatro días,para perderse en tus laberintos, tus recobecos; los muros descascarillados, la belleza de lo decadente, la humedad melancólica. Venecia, una ciudad para quedarse solo en el mundo, para vomitar toda la tristeza que alguna vez albergó el espíritu y sudar toda la soledad acumulada. Las jornadas se han hecho más que cortas entre sus paseos medievales, las noches fugaces en la Piazza Margarita y los momentos vividos junto a Ana y Verónica que nos acogió en su casa. Y me gustaría quedarme aquí para siempre, olvidar el pasado y recrearme en sus mil balcones llenos de plantitas y flores y ahogarme con el olor salado del mar que tanto se echa de menos cada segundo. Venecia, prostitua cada día del año, pero siempre es fácil encontrar un sitio donde abita la nada, donde solo quedan los recuerdos que flotan en sus canales, que matarían a los chulos que la prostituyen. Jamás esto podría ser un hasta siempre, sino siempre un hasta luego. ´´